Nos montamos en "El Saltamontes" y yo llebaba bailarinas. Claro, yo iba todo el rato:
-¡Las zapatillas, que se me caen las zapatillas!
Porque esa cosa no para de dar vueltas y saltar. Tuve suerte. No se me calleron. Aunque si se me hubieran caído hubiera preferido que encima del antipático del encargado del saltamontes.
Cuando salimos decidimos irnos a un simulador de la formula 1. Mi amiga y yo nos queríamos poner juntas, pero un niño se metió por medio y le tuve que pedir que se echara un poco hacia el otro lado, el se pegó más a mi amiga, pero al ver que no me sentaba comprendió que lado era y me senté al lado de mi amiga. Vinimos con otro chico que se tuvo que sentar con el niño ¡congeniaron un montón!
El trasto se movia tanto que tube que agarrar a mi amiga de la pierna para que no se callera. Hacía tanto calor. Cuando por fin salimos puse una cara de satisfacción por el fresquito que hacía.
Despues nos encontarmos con los padres del chico, que nos invitaron a otra atracción (desde aquí les digo GRACIAS). Era tan rápida. Mi amiga se puso en el lado en el que te aplastaban. Y cada vez que girábamos la comprimía y le clavaba el codo. Nos dieron un globo desinflado. ¡Era increible! Había que hacer cola para que te inflaran el globo. Ha mí me dieron uno pinchado y este es el aspecto que tenía cuado llegué a casa:
Bueno, como nos gusto tanto el saltamontes volvimos a montar, allí me encontré con una amiga del insti, que se monto justo de una forma que no nos pudieramos ver.
Yo seguía preocupada por mis zapatillas, a ver si se caían y de vez en cuando me echaba para el lado para no aplastar a mis amigos.
Así fue mi tarde en la feria.
Dew!!
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